La organización conocida como el Tren de Aragua (TdA) nació en las cárceles de Venezuela y se ha extendido en los últimos años por varios países latinoamericanos, como Colombia, Perú, Bolivia o Chile, donde las autoridades la acusan de cometer numerosos delitos, desde narcotráfico a extorsión, secuestros y homicidios.
Fue originalmente una pandilla carcelaria liderada por Héctor «El Niño» Guerrero, que la convirtió en «organización criminal transnacional», según el Departamento de Estado de Estados Unidos, que ofrece una alta recompensa por información que pueda conducir a su arresto.
Algunos medios señalan que el nombre puede deberse al de un sindicato de trabajadores del ferrocarril, que controlaba un tramo de la vía férrea que cruzaba Aragua y que extorsionaba a los contratistas.
La organización tiene sus inicios en el Centro Penitenciario de Aragua, también conocida como la cárcel de Tocorón, donde se extendió bajo el chantaje a internos como principal sistema de negocio, y ha incrementado sus redes en el extranjero desde el año 2020.
Muchos de sus integrantes son víctimas de la misma organización, personas incorporadas tras ser obligadas a pagar una cuota periódica para mantener su negocio o su integridad física. Las personas migrantes son uno de los objetivos principales.
En 2023, el régimen de Nicolás Maduro anunció el desmantelamiento de ocho «mafias carcelarias» en varios operativos desplegados en centros penitenciarios, entre ellas el Tren de Aragua, que operaba desde la prisión de Tocorón, una de las siete cárceles intervenidas.
Así, el cartel aprovechó el flujo de millones de migrantes de Venezuela a otras naciones latinoamericanas con el objetivo de expandir su presencia, extorsionando a migrantes, empleando métodos de secuestros y llevando a cabo asesinatos por encargo.
El Tren de Aragua tiene en la extorsión su fuente de ingresos más importante. Un informe del Departamento de Seguridad Nacional de EE.UU. identificó a presuntos miembros del TdA en 16 estados, hay abiertas unas 100 investigaciones federales relacionadas con el grupo y unas 50 detenciones. El gobierno de Joe Biden (2021-2025) también la declaró «organización criminal transnacional».
Expansión
La crisis migratoria venezolana fue la vía por la que el Tren de Aragua entró en países como Colombia, Perú, Bolivia y Chile, estableciendo así sus propias redes.
Un ejemplo es la frontera entre Bolivia y Chile, donde tienen una fuerte presencia y donde miembros del Tren de Aragua operan controlando los pasos fronterizos, el tráfico de personas y el tráfico de drogas.
La diversidad de nacionalidades de sus miembros es una de las principales características de la organización.
Mujeres, niños y adolescentes son las principales víctimas de entramados como el Tren de Aragua, que ofrecen «paquetes» para migrar, según explicó la presidenta de la Asociación Venezolana en Chile, Patricia Rojas, en 2023.
Su estructura se divide en tres niveles: un lugarteniente en contacto directo con los líderes, un grupo de responsables de empresas pantalla encargados de las finanzas y, por último, los soldados ejecutores de delitos.
«El Niño» Guerrero
Héctor Guerrero (Maracay, 1983), mejor conocido como «El Niño Guerrero» se encuentra en paradero desconocido tras huir en septiembre de 2023 de la cárcel de Tocorón, desde donde había liderado las operaciones del Tren de Aragua.
En febrero de 2018 fue condenado a 17 años de cárcel, entre otros delitos por homicidio, tráfico de drogas, usurpación de identidad y ocultamiento de armas de guerra.
Ingresó en prisión en 2018, pero tras una operación policial, en septiembre de 2023, el gobierno de Venezuela confirmó su fuga después de tres días del operativo en la cárcel de Tocorón.
Bajo el liderazgo de «El Niño Guerrero», el Tren de Aragua se ha expandido por otros países. Recientemente, en diciembre de 2024, la policía colombiana capturó a Carlos Gómez, alias «Bobby», señalado como el jefe de esa banda criminal en Chile.
Previamente, en marzo de 2024, un hermano de Guerrero, Guerso Isaac Guerrero Flores, fue detenido en Barcelona, España, y en julio de ese año fue extraditado por las autoridades venezolanas por su papel dentro del Tren de Aragua.
Pese a que «El Niño Guerrero» perdió el centro de operaciones tras la intervención policial de Tocorón, las operaciones del Tren de Aragua parecen mantenerse intactas, dentro y fuera de Venezuela.
Con información de EFE