El Gobierno español aseguró este miércoles que trabaja todos los días para conseguir la liberación de los dos ciudadanos de esa nacionalidad presos arbitrariamente por el régimen de Nicolás Maduro desde 2024.
En una comparecencia en el Senado, la secretaria de Estado para Iberoamérica, Susana Sumelzo, remarcó que el Ejecutivo no va a parar de insistir hasta que sean excarcelados.
Se trata de José María Basoa y Andrés Martínez Adasme, ambos de la ciudad española de Bilbao, cuya detención anunció el régimen venezolano el 14 de septiembre de 2024 en medio de una escalada de tensión con España tras la llegada a Madrid del dirigente opositor exiliado Edmundo González.
Están acusados de estar implicados en una supuesta operación que tenía como objetivo llevar a cabo actos «terroristas», entre otros asesinar a Maduro.
Durante todo este tiempo, el Ejecutivo ha hecho gestiones «al más alto nivel» para que sean excarcelados, ya que las acusaciones no tienen «ningún tipo de fundamento», incidió la secretaria de Estado.
Hasta hoy, concretó, se han emitido 19 notas verbales, se han enviado doce documentos solicitando conocer el paradero de los dos españoles y poder prestarles atención consular, además de colaborar con el Grupo de Desapariciones Forzadas o Involuntarias de Naciones Unidas, donde la familia de uno de ellos ha denunciado el caso.
Sumelzo respondió así en el Senado al ser preguntada por un portavoz parlamentario del opositor Partido Popular (PP, conservador) por las gestiones del Ejecutivo para liberar a once «presos políticos» con nacionalidad española en cárceles venezolanas, según datos.
También la interrogó sobre si se le había encomendado al expresidente del Gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero la tarea de mediar para lograr la puesta en libertad de los dos presos de Bilbao, una cuestión a la que Sumelzo no contestó.
Aunque el senador del PP habló de once personas con nacionalidad española encarceladas de manera «arbitraria» en Venezuela, el pasado 18 de mayo el Gobierno elevó ese número a 14. Todos tienen doble nacionalidad, salvo los dos ciudadanos de Bilbao.
EFE